Atlanta

Atlanta es mas pequeño de lo que esperaba. Yo imaginaba algo mas imperioso, con muchas instalaciones deportivas y administrativas al tratarse de un lugar que fue, en su día, el escenario de unos Juegos Olimpicos.

No obstante, hay algunos lugares de interés de obligada visita. El primero no es ni Coca Cola, ni el estadio olímpico, es la casa donde se crió Martin Luther King, dueño de frases como "si ayudo a una sola persona a tener esperanza no habré vivido en vano", maestro de la tolerancia, la diplomacia, el saber hacer. Ejemplo de paz, en sus manos cayo el premio Nobel. Pastor de oficio, líder por naturaleza y orador del discurso con mayor número de seguidores: ante 250.000 personas en el Capitolio rezó Yo tengo un sueño. Puedes pasear por las calles donde gritó a los cuatro vientos basta en contra de la violencia y el racismo, el lugar donde comenzó su lucha por el respeto a los derechos humanos. Cerca de su calle hay un centro de visitas y en frente, yace su cuerpo en un ataúd que reza, como no podía ser de otra forma: "yo tengo un sueño".

La segunda visita es curiosa: la fábrica de Coca-Cola. Y digo que es curiosa porque más que enseñarte cómo se hace, cuáles son sus propiedades o revelarte el secreto mejor guardado del mundo, Coca-Cola es un ejemplo de cómo una buena publicidad puede hacer de un producto el rey de la selva. Su secreto: equiparar la bebida con felicidad. Si bebes esto serás feliz. Fue una de las marcas pioneras en hacer merchandasing, distribución a través de las máquinas expendedoras o en traspasar fronteras inquebrantables en aquella época. Increíble.

Y la tercera visita es a la zona olímpica: su estadio, el parque olímpicos... Se respira ambiente deportivo e internacional. La CNN, el acuario, el jardín botánico... son puntos de interés que tienen su encanto.